23/03/25.- “No hay duda: María Corina Machado es una neofascista que, de manera pública y descarada, no tiene ningún reparo en congratularse con los regímenes fascistas, imperialistas y coloniales como el de El Salvador. A ella no le importa traicionar a los venezolanos y venezolanas con tal de alcanzar el poder político por cualquier vía”, afirmó el viceministro para América Latina, Rander Peña.

A través de su canal de Telegram, Peña calificó como "indignante y repudiable" las recientes declaraciones de la ultraderechista María Corina Machado, quien públicamente respaldó el trato cruel e inhumano que actualmente reciben los migrantes venezolanos en el exterior.

En este sentido, Peña señaló que Machado, al apoyar estas acciones, avala la criminalización sin pruebas ni el debido proceso de miles de compatriotas, quienes son víctimas de políticas que violan los derechos humanos más básicos y los principios de justicia y dignidad. "Estas personas están siendo perseguidas y sometidas a un sufrimiento innecesario, en una clara muestra de deshumanización y exclusión", expresó.

"Machado apoya y celebra el trato cruel e inhumano que se está aplicando contra nuestros compatriotas migrantes (…)" Su alineación con estos regímenes opresores y su complicidad con la persecución de venezolanos demuestran que no tiene ningún escrúpulo. Machado es capaz de venderse al mejor postor, aunque eso signifique traicionar a su propio pueblo y apoyar prácticas que recuerdan los peores crímenes de la historia", indicó.

El dirigente enfatizó que respaldar este tipo de prácticas es un acto que recuerda los peores episodios de la historia, donde se normalizó la violencia institucionalizada y la negación de los derechos fundamentales. "Quienes defendemos la vida, la justicia y los derechos humanos no podemos permanecer en silencio ante estas declaraciones", indicó.

Además, hizo un llamado a la comunidad internacional y a todos los defensores de los derechos humanos a denunciar y rechazar estas políticas. Igualmente, exigió que se respete el derecho internacional y se garantice un trato digno para todos los migrantes, sin importar su origen o condición.

"Este acto de complicidad con prácticas inhumanas merece el repudio unánime de todos aquellos que creemos en la igualdad, la justicia y el respeto a la vida humana", concluyó.

CIUDAD CCS