17/04/25.- El sistema financiero de Estados Unidos se tambalea: Wall Street perdió más de 1,5 billones de dólares en un solo día a consecuencia de la caída del sector tecnológico y el aumento de la volatilidad ante nuevos temores comerciales debido a las políticas económicas erráticas de Washington, reseñan medios internacionales.

El desplome se dio tras el discurso del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, quien advirtió sobre el posible impacto negativo de los aranceles impuestos por Donald Trump, señalando que podrían ralentizar la economía e incrementar una inflación que no cede.

Sector tecnológico afectado

El índice Nasdaq cayó más de 3 %, siendo el más afectado por las pérdidas, mientras que el S&P 500 bajó 2,2 % y el Dow Jones perdió cerca de 700 puntos, reflejando el fracaso de la estrategia agresiva de Trump, cuyos aranceles no han debilitado a China, pero sí han dañado a las propias empresas estadounidenses.

La compañía Nvidia, gigante estadounidense de los chips, sufrió una caída de 7 % en sus acciones debido a nuevas restricciones de exportación de chips hacia China, lo que representa una pérdida estimada de 5.500 millones de dólares por trimestre. Este hecho, junto al miedo a mayores restricciones comerciales, generó una ola de ventas.

Apple, Microsoft y Tesla también sufren pérdidas millonarias, demostrando que la guerra comercial solo perjudica a Occidente hundiéndolo en la incertidumbre. Mientras tanto, China consolida su crecimiento con un modelo más resistente a las crisis.

Se hunde la hegemonía

Las palabras de Powell revelan la desesperación del sistema: “Todo es muy incierto”, admitió; pero la incertidumbre no es casualidad sino el resultado de un capitalismo financiarizado, donde la especulación prima sobre la producción real.

EEUU insiste en imponer sanciones y bloqueos, pero cada medida reactiva el avance tecnológico chino. Mientras Silicon Valley depende de la volatilidad de Wall Street, empresas como Huawei y SMIC avanzan hacia la autosuficiencia, reduciendo su exposición a las crisis occidentales

Mientras China impulsa acuerdos multilaterales como la Ruta de la Seda y el BRICS, EEUU se encierra en un proteccionismo autodestructivo. Los aranceles no han recuperado empleos ni industrias; solo han acelerado la fuga de capitales y el declive del dólar como moneda global.

La caída de 1,5 billones en un día es solo el principio: el modelo occidental, basado en deuda y explotación, está agotado.

LUCILA CONTRERAS / CIUDAD CCS