Cine para llevar | Smiley, enamorarse en el 2022
Smiley es una comedia romántica que se sirve de todos los recursos del género
16/12/22.- Las historias de amor son historias de amor, no importa el género de los protagonistas. Siempre ha sido así, pero definitivamente en esta época llegó el momento de visibilizar realidades que anteriormente eran vistas desde la perspectiva del morbo.
La gente quiere amar, conectar, sentirse cerca de su prójimo. El amor romántico es uno de los placeres de la vida y en Smiley los protagonistas están desesperados por experimentarlo.
La soledad es un problema en esta época de hiperconexión y redes sociales. Estar acompañado a veces parece un lujo. La gente se compromete poco, son egoístas y dispersos, eso se dice en esta serie donde Alex (Carlos Cuevas) y Bruno (Miki Esparbé) intentan encontrar a su media naranja o naranja completa, eso no importa, lo que realmente les interesa es dejar de pasar los domingos solos mirando la televisión con un perro.
La soledad espanta, hiere, el amor da ilusión y alegría. En esa premisa se sostiene esta miniserie.
Smiley (disponible en Netflix) es una comedia romántica que usa todos los recursos del género. Sus creadores meten en una licuadora todas las películas románticas que hayas visto para crear una miniserie sobre amor rosado sabor a caramelo y azúcar. ¿Empalaga? No. La serie llega a ser muy divertida y nos devuelve la ilusión de aquel cine de los años noventa, inocente y aspiracional sobre encontrar el amor y establecer buenas relaciones.
El amor nunca pasa de moda y mucho menos en diciembre donde todos desean compartir con aquellas personas que son significativas. De esto se aprovecha esta ficción cuyo relato sucede en la época de Navidad.
Los personajes en Smiley están muy bien trazados, por lo que se hacen muy cercanos. Es un placer descubrir sus caracteres, manías y necesidades mientras la ficción avanza.
Basada en la obra de teatro original de Guillem Clua la serie narra varias historias de amor centradas finalmente en una sola, la de los dos protagonistas.
El tono de comedia y el buen desarrollo del humor hacen de la serie una oportunidad perfecta para desconectar y pasar el tiempo. En sus ocho capítulos no vas a sentir un declive en el desarrollo de la trama, por el contrario, mientras más avanza te conectarás más.
No la definiría como una historia de amor LGTBI porque a fin de cuentas, el amor no tiene nada que ver con géneros o grupos sociales. Por el contrario, la serie refleja emociones universales que todos los seres humanos experimentamos o deseamos experimentar.
El actor Carlos Cuevas ha dicho lo siguiente sobre su interpretación: "En mi carrera yo he estado más acostumbrado a algo más naturalista, dramas más cotidianos... Pero la comedia romántica tiene un código muy marcado. Y lo veo mucho en todas estas películas tanto en los 90 como en el cine clásico. Y piden de un estilo determinado".
En Smiley se cumple esa premisa de aquel viejo tema de Natalia Lafourcade: el amor es rosa.
Luisa Ugueto Liendo
@luisauguetol