Países caribeños piden fin del imperialismo británico y reparaciones

Expertos analizan los escenarios de la monarquía ante el ascenso de Carlos III

La monarca contribuyó con varias de las guerras de la segunda mitad del siglo XX e inicios del XXI.

 

09/09/22.- El fallecimiento de Isabel II y la sucesión de Carlos III, quien asume su cargo este sábado 10 de septiembre, ha suscitado llamamientos de los países del Caribe, que forman parte de la Mancomunidad de Naciones, para destituir al monarca como su jefe de Estado.

La Mancomunidad de Naciones (en inglés Commonwealth of Nations) es una organización compuesta por 54 países soberanos independientes y semiindependientes que, a excepción de Mozambique y Ruanda, ​comparten lazos históricos con el Reino Unido.

Entre los países que conforman el Reino, se encuentran: Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Jamaica, Bahamas, Belice, Granada, Papúa Nueva Guinea, Islas Salomón, Tuvalu, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves.

La reina Isabel II falleció el jueves y su hijo Carlos III de 73 años, subirá al trono del Reino Unido, lo que ha provocado fuertes reacciones por parte de los políticos y activistas de las antiguas colonias británicas en el Caribe y a la vez ha reavivado llamamientos de estos países, para destituir al nuevo monarca como su jefe de Estado, reportó HispanTv.

“A medida que cambia el papel de la monarquía, esperamos que esta sea una oportunidad para avanzar en las discusiones sobre las reparaciones para nuestra región”, enfatizó el jueves Niambi Hall-Campbell, académico que preside el Comité Nacional de Reparaciones de Bahamas, citado por Reuters.

En los 70 años de gestión de Isabel II, el Reino Unido era la potencia colonial más grande con su monarquía dominando a más de 412 millones de personas, en diferentes rincones del mundo, desde el sur de Asia hasta África.

Reparaciones

En este aspecto, refiere HispanTv, las naciones caribeñas piden que el Reino Unido pague las reparaciones a las naciones de la zona. “Todos deberíamos trabajar para destituir a la familia real como jefe de Estado de nuestras naciones”, agregó en la misma jornada el secretario general del Movimiento Caribeño por la Paz y la Integración, David Denny.

Las naciones como Jamaica, Las Bahamas, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas y Granada, entre las islas del Caribe, aún reconocen al monarca británico como su jefe de Estado. Sin embargo, Barbados se declaró una república en 2021.

Con la sucesión de Carlos III solo queda una pregunta, ¿el nuevo rey seguirá o no políticas colonialistas de su madre como líder del Reino Unido y jefe de Estado de otros 13 países?, refirió el canal de noticias persa.

Legado de sangre

Tras el primer impacto por la muerte de la reina Isabel II, cuyo nombre de nacimiento era Elizabeth Alexandra Mary, ahora llegan las evaluaciones de su mandato y se observa que ella, como jefa de Estado del Reino Unido, fue partícipe de un importante número de conflictos armados en todo el mundo desde que asumió el trono en 1952.

En otro artículo de Hispan TV se reseña la participación del Reino Unido y la Reina Isabel II en al menos siete (7) conflictos internacionales: Yemen, Egipto, Irán, Argentina, Irak, Afganistán, Siria y más de un millón de personas fallecidas.

Su primera participación bélica se materializó tan solo casi un año de su mandato, en 1953, cuando el Reino Unido se hizo parte en el derrocamiento del monarca iraní, Mohamad Mosadeq (1951-1953).

Las Malvinas

El continente americano, específicamente suramérica, también fue víctima de la política imperialista británica bajo el mandato de Elizabeth. La Guerra de las Malvinas fue un conflicto armado entre la Argentina y el Reino Unido desatado en 1982.

El conflicto duró 10 semanas y dejó un alto número de bajas de lado y lado, y se inicia con el intento de recuperación de Las Malvinas con la ocupación del puerto Stanley por tropas argentinas.

Se lee en la página del medio persa que el primer lord del Mar Henry Leach convenció a la primera ministra Margaret Thatcher de movilizar la flota para retomar el control de Las Malvinas. Pasado el conflicto, el almirante británico contó que creía que «estaba en juego» el prestigio de su país.

La victoria británica por una parte precipitó la caída de la dictadura en Argentina y, por otra parte, contribuyó con la reelección del gobierno de Margaret Thatcher en 1983.

Ambos países cortaron relaciones diplomáticas hasta 1990.

Nuevo rey impopular

La imagen del nuevo rey, Carlos III, y por lo tanto el futuro de la monarquía británica, también han sido sometidos al escrutinio tras concretarse el reinado que inicia este sábado.

El analista internacional, Issac Bigio, le manifestó a HispanTv que el rey Carlos III no tiene el carisma ni la capacidad de unir a los cuatro países: Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte, como lo había hecho su madre.

Agregó que existen nuevos retos que se suman al reinado ya que, “-la fallecida reina Isabel II- es altísimamente popular en el Reino Unido, porque no han encontrado nunca escándalos de tipo familiar, pero Carlos III no tiene la misma autoridad que su madre, además que la población británica apoyó a Diana -princesa de Gales- en el divorcio”, enfatizó.

Otro escándalo que rodea al nuevo rey, lo reveló el diario británico The Times el mes pasado en referencia a que él aceptó un pago de 1 millón de libras esterlinas (1,2 millones de dólares) de la familia de Osama bin Laden, fundador del grupo terrorista Al-Qaeda, quien planeó los ataques del 11 de septiembre, reseñó el medio del Oriente Medio.

A su vez, The Sunday Times informó que el heredero al trono británico había aceptado un millón de euros contenidos en una maleta del ex primer ministro de Catar, Hamad bin Jassim bin Jaber Al Thani, entre 2007 y 2013, además de otros donativos en efectivo que la autoridad catarí hizo para sus organizaciones benéficas.

Escenarios de la monarquía

HispanTv afirma que "la muerte de la reina británica se produjo en la peor situación política, económica y social posible que vive el Reino Unido. Este evento, sin duda, tendrá efectos importantes en la situación interna, en el mundo occidental y en las relaciones exteriores de este país".

Los escenarios que según el medio se presentan en el Reino Unido están referidos, por un lado, a que tras la muerte de la reina "y la ausencia de una figura eficaz e influyente tanto en el Partido Laborista como en el Conservador, muchos británicos perderán la esperanza en el sistema político, al mismo tiempo que el sucesor de la reina, el príncipe Carlos de 73 años, enfrenta la popularidad más baja posible en el Reino Unido por tener una vida marcada por los escándalos".

Por otro lado, la reina Isabel II era considerada como "la reguladora y controladora de las relaciones de las distintas facciones y conflictos políticos en el Reino Unido, pero con su muerte es probable que el país sea testigo de conflictos internos y entre partidos".

Otros posibles escenarios, de acuerdo con el medio persa son:

  • La crisis económica actual en Inglaterra y la muerte de la monarca, aumentarán la tendencia del pueblo y las élites británicas hacia el sistema político de la república, tal y como rige en Francia y Alemania.
  •  La muerte de Isabel II puede llevar al partido gobernante conservador y sus miembros extremistas a adoptar políticas radicales y unilateralistas en temas como los inmigrantes y las relaciones con la Unión Europea (UE), lo que será un duro golpe para la democracia y la política moderada de este país.
  • Tras la muerte de la reina, es posible que el equilibrio político en el Reino Unido se altere y la situación social del país avance hacia el conflicto de diferentes grupos entre sí como los partidarios y opositores del Brexit, e incluso minorías con anglosajones racistas. Además, este escenario podría dar lugar a severos conflictos entre la extrema izquierda y la derecha, así como a partidos a favor de la inmigración.
  • Después de 70 años del reinado de Isabel II, el prestigio y la credibilidad internacional del sistema político británico pueden disminuir significativamente, marcando el declive del Reino Unido ante los ojos de los países bajo su dominio y de todo el sistema internacional.

CIUDAD CCS


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