Épale es Caracas contada en poesía

La revista refleja el devenir de las y los caraqueños en su ciudad

"Quienes hacemos Épale vivimos la ciudad a diario y eso se refleja en el contenido de la revista".

 

08/08/23.- Niedlinger Briceño, directora de la revista Épale, con una sonrisa a flor de piel y ojos vivaces nos regala con elocuencia su paso por la revista, que ha definido desde hace 10 años el sentir y el vivir en Caracas. Una novia a la que todas y todos los habitantes de la capital percibimos con una suerte de relación de amor y odio, pero que sin duda nos pasa como cualquier enamorado adolescente, la amamos sin fin y la detestamos de a raticos.

Épale no pasa desapercibida, antes en papel, todos la buscaban como un clavel cada semana y ahora desde hace un tiempo nos llega su entrega por vía digital. La entrevista a Briceño se da en la sala de reuniones de Ciudad CCS, y es justamente ahí donde las preguntas y respuestas nos dan un pasaje de lo que hoy representa para las y los caraqueños el sentir del día a día en la cuna de Simón Bolívar.

—¿Cómo ha sido tu experiencia como directora de Épale?

— Realmente estoy en Épale desde el 2021, como editora estuve siete meses y aprendí mucho acerca del contenido que se produce en Épale CCS. Sus temas son mucho más reposados, ciertamente cuentan a la ciudad pero de una forma cronicada, humorística y mucho más tranquila. Eso permite que haya mayor profundidad en los personajes, cosas que ocurren en Caracas y que no son reseñadas por un medio de comunicación habitual.

Fíjate que últimamente están saliendo muchas ideas editoriales con el concepto de Épale. Por ejemplo ahorita hay muchas cuentas, muchos influencers que buscan conocer a Caracas desde otro punto de vista y es lo que Épale viene haciendo desde hace 10 años. Entonces creo que ciertamente es una forma distinta de contar una ciudad, además es la capital, o sea todo lo que pasa en esta ciudad es bastante, a cada segundo está pasando algo. El ritmo es muy agitado, los olores, los sabores, es el centro donde conjugan muchas cosas y eso es lo que siempre tratamos de contar en las distintas secciones de la revista.

Como editora fui conociendo de qué va la revista, además vengo de hacer periodismo cultural, de ser jefa de información en Ciudad CCS que es de actualidad y con Épale siento que le bajé dos. De cierta forma le di un 'parao' a la dinámica diaria y el año pasado entré como directora de la revista.

Cuando asumí había ciertas normas o reglas que hacían que una revista tan libre fuera cuadrada, o sea era contradictorio lo que estaba pasando. Estoy acostumbrada a lo contrario, pues vengo de militar en organizaciones y movimientos sociales, a ejercer el poder pero de una forma horizontal y eso fue lo que hice con Épale.

Efectivamente hay una dirección, una línea editorial que creo está bastante clara, pero quienes hacen el trabajo creativo de redacción, de ilustración, de diseño e incluso de corrección, tenían muchas ideas, pero consideraban que estaban de alguna forma censuradas y eso cambió.

—¿A qué sabe Épale?

—El sabor de Épale es sublime, cuando tú te lees una edición me parece que puedes encontrar muchas cosas, tiene muchos gustos, un sazón diferente dependiendo del redactor o la redactora y también siento que las y los columnistas le dan un toque muy especial a lo que vienen haciendo desde hace rato. Incluso este año ganamos premios con “Mejor ni te cuento”, con las columnas de Ana Cristina Bracho, que además es una excelente escritora y con las crónicas de Marlon Zambrano. También obtuvimos premio ganador con Épale y eso te da luces a qué puede saber nuestra revista.

Todas y todos estamos en la calle codeándonos, montándonos en el autobús, viendo cómo llegamos, metiéndonos en el Metro, con todas las crisis que puede tener la capital; en ese sentido hay mucho que contar y la propuesta de cada uno de estos redactores, redactoras y columnistas siempre son acertadas, la mayoría de las veces lo son, porque viven el momento que está viviendo Caracas, o sea, no estamos aislados a la realidad que ocurre en nuestra ciudad en ningún sentido.

Creo que Épale trata de concentrar todas esas historias que se viven desde distintas miradas, incluso de distintos lugares de Caracas, y que se proponen en nuestras reuniones de pautas, por eso hemos logrado abarcar muchos aspectos de la vida caraqueña y que además a partir del año pasado nos extendimos un poco y dijimos por qué no incluir la Gran Caracas, también está Miranda, La Guaira. Creemos que son sitios turísticos y sentimos que el turismo en este momento está dando mucho de qué hablar en la Gran Caracas y entonces por qué no cubrir esos sitios maravillosos que además son ciudades satélites.

"El feminismo es transversal en la línea editorial de Épale".

 

—¿Plantean el feminismo en la revista?

—El tema del feminismo es transversal en nuestra línea editorial y si no lo era, actualmente lo es. Muchos de estos movimientos que luchan por la igualdad, la equidad, nos contactan constantemente, nos invitan a actividades, están pendientes de publicar, envían textos y creo que siempre ha estado esa puerta abierta para todo aquel que quiera decir algo con respecto a la igualdad, a la lucha, de los derechos de las mujeres.

Creo que hay un feedback, una interacción, una receptividad con estos temas, no solo con el feminismo, sino también con la comunidad LGBTIQ, que también es uno de los temas que están siempre en la palestra en nuestra ciudad y sí creo que le damos el espacio necesario para poder decir, incluso denunciar, a pesar de que somos un medio de la Alcaldía de Caracas, creemos que debe ser una ventana para denunciar, para la autocrítica y para proponer por supuesto.

—¿Qué secciones nuevas hay en Épale?

—Hay varias, entre ellas está “Bajo la Lupa”, que tiene que ver con reseñas de libros o de películas, sin hacer spoilers, son reseñas objetivas donde se dice de qué va, qué tema se trata y una invitación a que lo vean, lo lean o no. Porque también hay películas y libros muy malos, que decimos no, esto no hay que verlo o leerlo.

Está “Antroponautas” que tiene que ver con reseñas, pero de personajes en específico. Se trata de meterle la lupa a una persona determinada, caracaterizarla y de ahí salen muchas aristas.

“Séptima Morada” que está vinculada con las reseñas de cine pero feminista, que escribe la compañera Rosa Raidán, especialista en reseña y ella está llevando la columna, quien además fue durante mucho tiempo coordinadora de cultura en Ciudad CCS.

Por supuesto, dentro de la revista me gusta más la entrevista, porque siempre terminas conociendo más de una persona de lo que pensabas. Además que las entrevistas siempre tienen preguntas poco comunes que dan como en el clavo a que ese entrevistado se relaje un poco. Creo que son muy libres, son muy abiertas y la gente puede expresar lo que desee. Además siempre la acompañan foto retratos muy buenas, tenemos fotógrafos excelentes y creo que eso le da un toque genial a lo que es la entrevista.

Otra que también me gusta es la de “Soberanías Sexuales”, que además vengo escribiendo desde el 2020 cuando estaba Carlos Cova, quien me invitó a escribir y empecé a hacerlo. Esa sección es rotativa, pero claro, cuando hablas de soberanía sexual la gente puede imaginar que se habla de puro sexo, de puro coito, sin embargo cuando comienzas a leer sus artículos te das cuenta que hay un tratamiento de la sexualidad en su máxima expresión.

En "Soberanías Sexuales" pueden encontrar historias de parto, de lactancia, pero también puedes encontrar experiencias de Tinder, de alguien tratando de conocer a otras personas. Puedes encontrar historias de tríos; la forma en que los niños y las niñas se relacionan o sea puedes encontrar un montón de cosas que tú dices ¡Guao! Todo esto abarca lo que es soberanía sexual, y siento que como lo escribimos varias personas, tenemos varias miradas.

Algunas somos madres otras no, algunas son lesbianas otras no, es decir varias opiniones le da diversidad a lo que es "Soberanías Sexuales", que es lo que se quiere dentro de esa sección. Es entender la sexualidad en su máxima expresión sin tener límite de ello, como un hecho natural, un proceso natural y transversal en todos los seres humanos.

"Invitamos a los fotógrafos de Caracas a enviar su propuesta a la revista para ser publicada".

 

—¿Hay retroalimentación con los lectores a través de las redes sociales?

—Sinceramente ha sido una pata coja el tema de las redes sociales, porque efectivamente es para tener esa interacción, pero también garantiza la promoción de nuestros contenidos. A veces estamos escribiendo, publicando un montón de cosas todas las semanas y nos decimos pero ¿quiénes nos están leyendo? Por eso creo que a través de las redes sociales le podemos dar promoción a todo el contenido que tenemos. Siento que estamos como tratando de empujar, porque nos parece importante estar en todas esas trincheras en las redes sociales, en la web, pero también en el diálogo presencial, creo que por eso se hacen algunos conversatorios, foros y actividades aquí en Ciudad CCS.

Creo que las redes sociales es algo a lo que tenemos que seguir metiendo gasolina y que tenemos que confiar en eso. Opino que falta credibilidad en eso que las redes hacen, que de verdad tengamos una interacción directa, hacer que la gente nos lea y pueda comentar acerca del contenido que estamos haciendo.

Briceño despide la entrevista con una invitación a todas y todos los fotógrafos que les gusta Caracas y su paisajismo singular, a enviar sus fotografías a la sección de “Caracas Viva”, para ser seleccionada y publicada.

Pueden participar fotógrafos de la ciudad, envían su propuesta de fotografía a caracasviva.epaleccs@gmail.com. Tiene que ser en horizontal, de paisaje, para poder colocarla en la página y esto de alguna forma le da protagonismo a quienes nos leen a las y los fotógrafos que normalmente por hobby le hacen fotos a Caracas”

JOSE ANTONO RAMÍREZ / FOTOGRAFÍA: AMÉRICO MORILLO / CIUDAD CCS


Noticias Relacionadas