07/09/2024.- La primera película que vi de Xavier Dolan (Canadá, 1989) fue hace más de diez años, y se titula Latidos del corazón (Canadá, 2010), un drama que narra un tenso triángulo amoroso LGBTQ+ entre dos chicos y una chica.

En ese trabajo somos testigos de una pugna entre un par de amigos (Francis y Marie) por robar la atención de Nicolás, un joven apuesto idealizado que se mueve en la ambigüedad sexual.

Latidos del corazón fue el segundo trabajo de Dolan, quien para la fecha de su estreno tenía solo 21 años. El realizador había estrenado su primera película, titulada Yo maté a mi madre, un año antes (Canadá, 2009). Con esta obra, el artista aborda, con tintes autobiográficos, los conflictos entre Hubert, un adolescente homosexual de 16 años, y su madre, una mujer que trata de "especial" a su hijo.

Ambas películas consolidaron en este joven director un estilo característico, marcado por paletas de colores hipnóticas y escenas ambientadas con música bien escogida. También vemos en su obra secuencias dilatadas, muy parecidas a un videoclip musical. Estos ingredientes, junto a historias bien interesantes, bastaron para que Dolan cultivara una pequeña pero sólida legión de fanáticos hipsters.

No obstante, creo que con la película Mommy (Canadá, 2014) Dolan va más allá y logra captar completamente la atención de la crítica especializada. Esta cinta es un antes y un después en la filmografía del joven realizador.

Escrita y dirigida por Dolan, Mommy nos transporta a un futuro indeterminado en Montreal, en donde un gobierno local permite que los padres internen en instituciones estatales a sus hijos conflictivos. La película comienza cuando Diane, una madre joven y viuda, retira de un retén a su problemático hijo de 14 años, Steve, quien padece de graves trastornos de violencia y atención. Los encargados expulsaron al adolescente luego de que este causara un incendio en el comedor.

Ahora, con las deudas por los aires y sin muchas opciones disponibles, Diane se ve obligada a pagar los daños, así como a criar y educar al incontrolable Steve. Para esta extenuante tarea, la protagonista se apoya en Kyla, una vecina que tiene problemas de lenguaje, pero que está dispuesta a ayudar a Diane y Steve.

Aparte de las notables actuaciones de Anne Dorval (Diane), Antoine Olivier Pilon (Steve) y Suzanne Clément (Kyla), de Mommy destaco la brillante capacidad de Dolan a la hora de construir personajes. En esta oportunidad es más evidente que el joven artista se documentó muy bien sobre el trastorno de déficit de atención, la hiperactividad, la conducta antisocial y la bipolaridad a la hora de crear este maravilloso trío. Así lo refiere un trabajo publicado en la revista Ética y Cine, de los especialistas audiovisuales de la Universidad de Málaga, Francisco Javier Ruiz del Olmo y Cristina Hernández-Carrillo. Al respecto, dicen:

Hay un gran trabajo de documentación tras este film, pues la forma de representar todos los aspectos psicológicos de los personajes es bastante acertada con respecto a la realidad de un adolescente que pueda sufrir ese tipo de trastornos y situaciones.¹

Otro punto a destacar es la acertada selección de temas musicales. Pese a que son canciones pop de artistas como Oasis, Lana del Rey y Céline Dion, la música de ellos encaja perfectamente en el momento adecuado. Ayudan a una experiencia más inmersiva y envolvente. En pocas palabras, las canciones no están por estar.

Asimismo, es importante señalar que Mommy está rodada con una relación de aspecto 1:1, es decir, solo vemos un cuadrado en toda la pantalla. En un primer momento, pensé que era un gesto pretencioso del director, pero con el transcurrir de la historia entendí que es un elemento necesario y clave.

Mommy se estrenó en Cannes en 2014, en donde recibió el Premio del Jurado (tercer lugar), luego de recibir durante la noche de su estreno una ovación de pie de trece minutos, lo que marcó uno de los momentos más memorables de esa edición.

Más que un simple vistazo, esta película es merecedora de un análisis (o psicoanálisis, dependiendo del caso). Es una historia apta para todo público que atrapa y cautiva; sin embargo, la disfrutarán mucho más educadores o especialistas en estudios del comportamiento humano.

Para intercambiar opiniones y conocer más de Mommy, puede escribir a columnacontraplano@gmail.com.

Carlos Alejandro Martin

¹Ruiz del Olmo, F. J. y Hernández-Carrillo, C. (2018). La unión de psicología y cine en la construcción de personajes. El caso de Mommy (2015), en: Ética y Cine Journal, vol. 8, núm. 1, pp. 61-70. http://journal.eticaycine.org/La-union-de-psicologia-y-cine-en-la-construccion-de-personajes-El-caso-de-Mommy.